HOME
ASOC. COOPERADORA
DIRECCION
EDITORIAL
NOTICIAS
HISTORIA
VECINOS
TALLERES
NUTRICION
ESPECIALIDADES
CONTACTO
SITIO WEB DE SALUD Y CALIDAD DE VIDA DE LA ASOCIACIÓN COOPERADORA DEL CENTRO DE SALUD “LEONOR NATALI DE CAPPELLI”
La solución terapéutica que se le niega a muchos pacientes
Publicado Mayo 2016
CANABBIS MEDICINAL: FALTAN NORMAS QUE GARANTICEN SU PRODUCCIÓN Y ACCESO
Por la Doctora Soledad Pascual
Como es de conocimiento público, el cannabis se usa de manera terapéutica desde hace miles de años. En nuestro país recién en el año 2017 se aprobó su uso de forma medicinal, con la consiguiente legalización en su prescripción y uso terapéutico. Esto es que el medico lo puede prescribir y el paciente lo podría utilizar sin problemas. Pero aun no está legalizada la producción ni la venta del aceite de cannabis ni otras formulaciones terapéuticas, con lo cual genera muchas dificultades indicar tratamientos si uno no tiene forma de conseguirlo.
Además, actualmente no está reglamentada la forma de prescripción. O sea, se puede indicar con firma y sello pero aún no reglamentaron si se hará con recetarios regulares o archivados.
De todas formas, es una discusión que aún no es prioritaria ya que no contamos con fórmulas estandarizadas del aceite, esto es que sean seguras y controladas (así como cualquier fármaco).
En Bahía Blanca, los médicos que prescribimos el aceite sugerimos como forma segura de tratamiento el autocultivo y ofrecemos la
posibilidad del análisis del aceite en la Universidad Nacional del Sur.
Es cierto que se puede conseguir de forma no segura y por supuesto no legal en algunas páginas de internet, pero lamentablemente
no se saben las características de esos preparados y por supuesto uno no lo puede indicar de forma segura.
La otra manera de adquirir el aceite es a través del Registro Nacional de Pacientes con Cannabis (RECANN) de la ANMAT. La realidad
es que a pesar de tener planilla completa y firmada por medico autorizado, sólo acceden en algunas oportunidades pacientes con
diagnóstico de epilepsia refractaria. El ANMAT lo importa desde Estados Unidos.
Es mucho lo que nos queda por transitar, no sólo para que profesionales se capaciten y puedan informar adecuadamente a los
usuarios, sino que también es necesario involucrarse fuertemente en el desarrollo de estrategias para garantizar -a aquellas personas
que tienen prescripción de usarlo- el acceso a aceites realizados dentro de condiciones adecuadas y analizados a fin de administrar
un tratamiento seguro y efectivo.
La doctora Soledad Pascual a menudo presta servicio en la Guardia del Centro de Salud “Leonor Natali de Cappelli”.